- Quienes suscribimos esta declaración somos representantes de diversas organizaciones de la sociedad civil que trabajan con personas en situación de vulnerabilidad y pobreza en nuestro país.
- Como organizaciones hemos estado a disposición de la autoridad desde el día uno de la pandemia.
- Desde nuestro trabajo, observamos los graves efectos que la pandemia está produciendo en los hogares.
- Valoramos los enormes esfuerzos financieros y de gestión que está haciendo el Estado para mitigar la situación de los compatriotas que están enfrentando con enormes dificultades la emergencia sanitaria.
- Hoy levantamos nuestra voz con preocupación por la inédita situación de hogares que día a día con luchan con dificultad para llevar el pan a sus hogares y que deben paralelamente, cumplir con exigencias de aislamiento.
- Esta realidad requiere actuar con responsabilidad en el cuidado de los recursos públicos y hacerlo de manera eficaz, pertinente y oportuna en el apoyo a los hogares.
- Ello sólo es posible en base al diálogo. Por esta razón solicitamos a las autoridades de gobierno y al Parlamento que puedan acordar mejoras al actual proyecto de ley de Ingreso Familiar de Emergencia (Boletín N°13.461-31).
- Ello requiere no presentar un veto al proyecto por parte del Presidente de la República, dejando así espacio, para que dentro del monto ya decidido de US$2.000 millones por la autoridad de Hacienda, pueda mejorarse el proyecto.
- Respecto al Proyecto de Ley nos preocupa particularmente:
1.- El universo.
Sin perjuicio de compartir el realismo fiscal, no compartimos que se diferencie entre personas que han caído en pobreza y vulnerabilidad, por tener ingresos de origen diverso.
La informalidad es un foco importante, qué duda cabe; sin embargo, existen situaciones muy severas en el universo de personas con ingresos formales en pobreza.
Pensemos en los hogares en donde una persona recibe una pensión no contributiva por vejez o invalidez. En esta crisis, ellas no pueden ser el pilar de ingresos de una familia. Lo mismo sucede con trabajadores informales que de vez en cuando y por cantidades pequeñas pueden hacer una boleta de honorarios, (por trabajar una semana en el mes “pasan a ser formales”).
Planear una diferenciación en sectores que se encuentran en idéntica condición de vulnerabilidad y pobreza, no resulta razonable. Ella impedirá que hogares en idéntica condición, reciban el mismo beneficio y tengan la misma capacidad para enfrentar esta crisis.
2.- El monto.
No seremos nosotros los que planteemos gastar más. Sí podemos pedir gastar de manera distinta en el tiempo el fondo de USD 2000 millones que el gobierno ha reservado para ir en ayuda de estos hogares, permitiendo así salvaguardar la dignidad de las personas.
Por ello pedimos que el monto que se asigne en el Proyecto debe ser cercano al menos al monto de la línea de extrema pobreza (recursos necesarios para la alimentación de una familia). Dependiendo del tamaño del hogar, ese valor fluctúa. Hoy el valor per cápita para una familia de 4 personas es de aproximadamente $73.000. Es lo mínimo para que lo entregado no profundice más la humillación y el sentimiento de injusticia tan arraigado en quienes experimentan a diario la precariedad económica y la pobreza.
Compartimos con el Ejecutivo reservar recursos para situaciones futuras inciertas. Con todo, hay dos elementos centrales que creemos deben sopesarse en esta discusión. En primer lugar, como sociedad le hemos pedido a millones de personas que se queden en cuarentena, sin poder trabajar ni percibir ingresos. Es ahora cuando debemos asegurarles al menos el piso mínimo de financiar su alimentación. De este modo, estaremos facilitando las cuarentenas, permitiendo que el periodo de detención de contagios sea más corto y las ayudas que se necesiten entregar, finalmente menores.
Por otro lado, es en este mismo periodo cuando se produce un aumento del gasto de los hogares por efectos del frío, enfermedades respiratorias, aumento de valor de bienes básicos, principalmente alimentos perecibles, entre otros aspectos que dibujan un escenario agobiante para quien hoy vive en pobreza y exclusión.
Por ello creemos que, no aumentando los recursos disponibles, si puede revisarse un aumento de monto del bono en estos meses, entendiendo su carácter de ingresos básico para la subsistencia en una situación de emergencia en meses habitualmente complejos, mucho más ahora. No podemos vulnerar aún más la dignidad de quienes hoy están experimentando los efectos de esta crisis, requerimos una respuesta que no dañe el presente y futuro de niños, niñas y familias vulnerables.
3.Aspectos administrativos.
Hay que reiterar que en los tiempos que corren no existan trámites complejos de cumplir por los posibles beneficiarios. El empeoramiento en la situación de las familias nos demanda, a todos, la mayor celeridad posible: en las decisiones, en la facilidad de los trámites y en la entrega de beneficios. Nosotros seguimos disponibles para seguir apoyando todas las iniciativas que surjan desde los territorios y en el trabajo con los grupos más vulnerables, tarea que recae principalmente en los municipios.
Nuestras organizaciones llevan años trabajando con las comunidades más pobres de nuestro país, nos sentimos parte de ellas. Hoy hacemos un llamado a legislar teniendo por delante la dignidad de cada ser humano de nuestro país.
ORGANIZACIONES FIRMANTES:
Andrea Repetto, Fundación Superación de la Pobreza
Rodrigo Jordan, Comunidad de Organizaciones Solidarias
Fabian Duarte, Núcleo Milenio en Desarrollo Social, DESOC
Benito Baranda, América Solidaria
Olga Diaz Guerrero, Fundación de menores Domingo Savio
Karen Cortés Takeda, Fundación Cristo Especial
Ana, Maria González, Fundación DEBRA Chile
María José Escudero, Fundación Ronda
Francisco Javier Calderón Quinteros, Fundación Amalegria
P. Jorge Muñoz Arévalo SJ, Vicaría Pastoral Social Caritas Santiago
Sebastián Bowen, Techo Chile + Fundación Vivienda
Marcela Segovia Embry, Fundación Patronato de los Sagrados Corazones
Glenda Durán Caro, Fundación Eres
Francisca Droguett, Fundación Trabajo para un Hermano
María de Los Angeles Castro, Fundación Infancia Primero
Ingrid Zimmermann, Fundación Incluir
Matías Reeves, Presidente Educación 2020
Patricio Massardo Marchant, Fundación Trato Hecho Vecino
Paola Peña Orellana, Fundación Abrazo Fraterno
Vania Martínez, Núcleo Milenio para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes
Rosa Villa Vergara, Fundación Vida Más Sueños
Tomás Reyes, Fundación América Solidaria Chile
Arturo Celedon, Fundacion Colunga
Clarisa Hardy, Instituto Igualdad
Mónica Gana A, Fundación de Ayuda al niño oncologico Sagrada Familia
Felipe Olavarria Orrego, Fundación Miradas Compartidas
Mónica Izquierdo Yañez, Casa de Caridad Don Orione
Francisca Egaña, Fundación Lealtad Chile
Maria Irene Duarte, Figueroa ONG Maria Acoge
Pablo Hormazabal, Corporación Formando Chile
Vicente Gerlach, Fundación Trascender
Marta Ibacache, Fundacion Abrazarte
Gonzalo Vial, Fundación Huella Local
Pilar Goycoolea Ferrer, Fundación Urbanismo Social
Ester Valenzuela, CIDENI Centro Iberoamericano de Derechos del Niño
Gabriel Villalobos, Ong cealivi Quillota
María Paz Badilla, Fundación Ideas para la infancia
Luis Berrios, Vicaria de Pastoral Social
Igor Morales, Centro de Innovación para las Contrataciones y el Abastecimiento
Osvaldo Jorquera, Centro de Emprendimiento Integral
Carla Montecinos, Red Latinoamericana de Abastecimiento
Cecilia Stehr, Fundacion Crecer
Rosanna Nitsche, Fundación Quien Cuenta Eres Tú
Felipe Gross, Corporación Educacional Emprender
Gloria Mieres Varela, Fundación para la Infancia de Coquimbo
Veronica Novoa, Fundación Inspira
Francisca Acevedo, Fundación María Jesús Vergara
Elena Mansur, Crosscultural
Margarita Guzmán, Fundación Sentido
Niniza Krstulovic Matte, Fundación Cerro Navia Joven
Niniza Krstulovic Matte, Fundación Educacional Cerro Navia Joven
Niniza Krstulovic Matte, Otec Cerro Navia Joven
Niniza Krstulovic Matte, Fundación Cerro Navia
Rosa María Miranda Tobar, Teabrazo Magallanes
Nicolás Cruz C., Basepublica
Isabel Lacalle Pons, Corporación Nuestra Casa
Héctor Correa Galaz, Corporación Jesús Niño
Ana Cox D, Corporación Yo mujer
Paulo Egenau, Hogar de Cristo
José Fco. Yuraszeck Krebs, S.J., Hogar de Cristo
Paz Donoso, Fundación Quiero Mi Casa
Juan Moreno Gamboa, Sindicato Interempresa líder de trabajadores Walmart Chile
Luz Borges Ossea, Banco de Libros
Verónica Paz Soto Contreras, OPADHIDIM
Carolina Contreras, Fundación Pro Bono
Jorge Hernandez, Fundación Patio de recreo
Carolina Galaz, Fundacion Lacaracola A Ser Feliz
Raúl Valdivia, Fundación Sonrisas
María Ignacia O’Shea, Fundación Santa Ana
Karent Hermosilla, ONG Psicólogos Voluntarios de Chile
Andrea Garrido, Fundación Educacional Chile Dual
Carola Rubia, Fundacion Descubreme
Marcela Marzolo, Fundación Educacional Oportunidad
Víctor Hugo Romo, Asociación de Consumidores Bicicultura ADC
Amarilis Horta, Bicicultura
Susana Gómez, Alforjeando Chile
Justo Valdés, Fundación Educacional Cristo Joven
José Andrés Murillo, Fundación para la confianza
María Pía Salas Mora, Fundación Abrazarte
Mauricio Farías, Fundación I-Tek
Soledad Diaz de la Fuente, Fundación Aldea
Carola Rubia, Fundacion Descubreme
Marcela Barria Valencia, Fundacion Crescendo
Alberto Paredes Ortiz, Fundación Chilena Ajedrez Social y Terapéutico
Eliana Collao Pino, Hogar de Niñas Las Creches
Francisco Campos P., Fundación para la Innovación Participativa
Carola Gana, Fundamor
María Teresa Hormazábal Bravo, Consejo comunal de discapácidad de LAMPA
Christian Abud Cabrera, Representante Legal Corporacion NAIM Curico
Gabriela Herrera Reyes, Corporación Dolores Sopeña
Sonia Castro, Fundación Mama Terapeuta
Claudia Rodríguez, ONG NoChat
Claudia Sanhueza, Centro de Economía y Políticas Sociales, Universidad Mayor
Alejandra Fuenzalida S., United Way Chile
Renata Ávila, Fundación Ciudadanía Inteligente
Mercedes Ducci, Comunidad Mujer
Paulina Robles Werner Wildner, Fundación Microtia e Hipoacusia Chile
Jeannette Boudon Gonzalez, Asociación de Damas Salesianas
Johanna Montero Zeledón, WorldVision Chile
Johanna Montero Zeledón, WorldVision Chile
Angelina Merino, Fundación Incluir
Alejandra Michelsen, Fundación ITACA
Rodrigo Mercado, Fundación África Dream
Marcela Parada, Fundación Más
Vivianne Galaz, Fundación San José
Héctor Correa Galaz, Corporación Jesús Niño
Cecilia Alarcon Guerin, Corporacion Espina Bifida
Matías Vicente, Centro Rabbani
Marcia Mellafe Opazo, Marcia Mellafe Opazo personal
Fabiola Fariña, Particular
Jorge Salgado Ayala, ONG Autribu
Imel Cubillos Pérez, FUDESO
Mónica Hernández Lemus, Fundación Koinomadelfia
Mauricio Rojas Mujica, Corporación Educacional Tricahue
Michael Mayne-Nicholls, Corporación privada La Granja
Rosario Lavandero, Fundación para la Infancia Ronald McDonald
Marcelo Sandoval, Fundación Ludovico Rutten
Carolina Galaz, Fundacion Lacaracola A Ser Feliz
Paulina Readi Jofré, Centro Gerontológico Universidad La República
Arturo Latorre, Fundación Gesta
Isabel Angelina Merino Thayer, Fundación Incluir
Francisca Droguett, Fundación Trabajo para un Hermano
Santiago Mallagray, Ingeniería Sin Fronteras Chile
Catalina Cuadra Montes, Fundación Deporte Libre
Magdalena Hernandez, Fundacion Tregua
Luz Isabel Cordova Jara, Consejo comunal para la Discapacidad de Mulchen
Daniela Grau, CORPALIV
Patricia Ubilla Hormazabal, Concejo comunal de la Discapacidad
Karina Muñoz Matus, Fundación Conciencia Vial
Sergio Macias Gutiérrez, Consejo comunal de Cunco